Cuándo la vida te dice tantas veces que estás en el camino equivocado, eso sucede justo en ese momento donde haces todo para que amanezca y sigue oscuro. Los pasos cansados de seguirte para que al final me pasaras y corrieras más rápido. Ya no te alcancé.
Dejé que las luciérnagas me cegaran, que su luz me confundiera, ¿qué debía hacer?. Lo último que debiste decir era "ya no te amo".
Lo último que puedo decirte no existe, ya no tenía mas palabras para ti. Me las acabé ese último día que nos vimos, ese último día que me senté a escucharte, que te di el tiempo para que me dejaras ir o me retuvieras. No dijiste nada, ¿ que tienes que decir ahora?. Borralo, cállate tu amor de ratos, tu amor que me tienes solo cuando no estoy, guardatelo.
Eres inconsistente, inestable, fugaz y de eso ya tuve una vida;
No puedes verme pues me estoy escondiendo de tus temporalidades. No me busques pues no encontrarás a la persona que se fué.
Ni si quiera me reconozco yo, pero me gusta saber que esa persona se fue contigo y no volverá.

Decías que me convertí en lo peor, tu me lo hiciste, tu me hiciste esa persona.

Y si te cortas las alas, regresame el viento que te hizo volar, justo ahora que no lo necesitas.
Encontraré ese otro tú, ese que ahora no estará dentro de ti.
Lo último que dijiste me hizo escribir “lo último de ti”.
La soledad dormía conmigo, olvidaste como hacerme sentir, sentirme.
Claro que mi inconsistencia te hizo cambiar de parecer, pero las incongruencias nos llevaron a la puerta.
Tu no me dejaste ir, tu no me liberaste, fui yo la que se corto el cordón.
Y tus ganas, las pocas que quedaban; menos las que ya no me tenías.
En mi aliento se esconden los intentos de gritarte que te quedarás para siempre. A oscuras buscando nuestros labios, adivinando, como si eso nos fuera a asegurar el futuro.
En los días soleados, cuando llovía, cuando parecía que mis piernas no responderían. Cuando no quería y tu querías que ya no te quisiera. Siempre, siempre te quise.
Claro que me mantengo arriba ahora que no estás, desde las alturas nada parece tan importante.
Me hice fan de ésta vida donde me falta hasta la cordura para decidir si llamarte o no.
Amar las ideas que tuvimos bajo la influencia de eso que creíamos eterno.
Dejar que el viento te pasara y te despeinara mientras yo seguía soñando contigo aún sin tenerte cerca.
¿Qué es el amor? Es eso que sentimos pero que no entendíamos tenía fecha de caducidad.
Dejaste que muriera lo que sentía por ti, pero no era tan débil.
Siempre te amaré, como cuando creemos que será para toda la vida…