sábado, agosto 17, 2013

Cuando alguien se enamoró de mi.

Le miraba todo el tiempo, estaba maravillada.
Le conocí en un lugar que amaba, tal vez fue eso lo que me imantó.
Yo estaba rota y al mirarle su carente luz entró por esas grietas, no necesitó brillar mucho.
Que locura saber que no vales tanto y aún así me atrapaste.
Tenía la inocencia de una niña que se deslumbra por cualquier cosa, aún la tinta de su piel me parecía magnífica ¿Entonces qué fui yo?
Fui diamante que proyecto una luz artificial, fui tu juguete, fui tu amor fugaz.
Te enamoraste de mi, pero no pude resistirlo, como siempre.
Dicen que si te quiere no te hará llorar, pero es mentira por que el amor te hace ser imperfecto, y equivocarte.
Amar te hace lastimar sin quererlo.
Si te quiere, llorarás ya que las lágrimas son lo más real.
Me tomaba de las manos tan fuerte que me quedaban sus dedos marcados, me miraba tanto que aún le veo cuando me siento triste, es la personificación de mi peor momento, de mis días más desolados.
Quería una vida conmigo, quería todo conmigo, lo dijo un día después de una exposición de arte.
Éramos arte, del más efímero y falso, del más pretencioso.
Yo se por que me gustaba tanto, era como yo, era como la vida que deseaba para mi, era yo antes de querer ser una mejor persona.
Mientras corría agosto se iban mis sentidos, mi conciencia, mi juicio de lo que es bueno o malo.
Solía ser una idea de mi, después llegó y mientras besaba mis sueños, sacaba de mis poros ese lado obscuro que quería de mi.
-"todos tenemos un lado obscuro", me decía mientras me miraba en ese esquina del bar medio drogado, mientras lloraba hundida en esa madeja de alambres.
Efervescencia que me acercó a la maldad pura de un corazón que estaba demasiado dopado como para quererme.


1 comentario:

  1. Cómo la vez que me tope con tu blog rn Google, te conocí, vi lo increíble que eres y ahora jamás dejaré de leerte.

    ResponderEliminar